Pasito a pasito y casi sin darnos cuenta ha empezado la primavera. Los días alargan y los minutos de claridad van sumando semana a semana y con ello nuestros cultivos de invierno corren y corren desmesuradamente para terminar su ciclo antes de que la temperatura suba demasiado.
Por otra parte, la primavera nos sorprende con productos de las fechas como las alcachofas de verano o de semilla.
Algunas de sus variedades casi pueden asemejarse a la tradicional Blanca de Tudela, que es el patrón a seguir.
Son plantas muy vigorosas y su producción es muy rápida y cuantiosa. Al igual que la de Tudela posee dos brotaciones pero en fechas distintas. La primera ahora y la segunda Julio.
Es un cultivo muy sensible a ataques de oidio con lo que la buena aireación y evitar los excesos de humedad es una práctica recomendable en agricultura ecológica.